jueves, 28 de agosto de 2014

Somos del barrio

Es bonito que los chicos ya estén formando parte del barrio. Y de rebote nosotros también. Nueva escuela, nueva barnehage y amigos que viven a menos de cinco minutos de casa. Da gusto oírlos reír, correr y saltar juntos por las tardes después de la escuela. Me recuerda a las vacaciones de verano de mi infancia. Algo así en Barcelona sería imposible.

Ha sido un mes de adaptación para los chicos, pero parece que va dando sus frutos. Ahora ya van muy contentos. El mayor tiene que hacer una tarea diaria en casa (letras, números, dibujos esencialmente) A veces también hay deberes que son explícitamente compartidos con los padres y las madres. Por ejemplo, el otro día teníamos qué hablar sobre qué es un buen amigo en casa. Al día siguiente lo tenía que explicar en  clase.  Otro día observar una foto y hablar sobre la letra "i" 

Por lo que a mí respecta, con el curso de noruego estoy muy satisfecha. Noto que no sólo reafirmo conocimientos (que era necesario) sino que tanto puedo dar un poco más de aire y soltura a mis expresiones orales como usar verbos específicos. No sé si me explico. La idea es que me siento algo más confortable con el idioma. Pero debo seguir aprendiendo, claro está.  Por otro lado, también me estoy empezando a mirar temas de derecho inmobiliario, derecho español versus noruego por mi cuenta. Es "friki", lo sé, pero para qué negarlo...me gusta.

Cambiando de tema, el fin de semana pasado lo pasé bien con los turistas. En esta ocasión los esperaba a pie de bus.

¡Hasta la próxima!


PD: Benvingut Arnau! Velkommen Justus Theodor!






jueves, 21 de agosto de 2014

Integración escolar y...más noruego

Os confirmo que casi, casi estoy integrada deportivamente en el medio, porque practico jogging bajo la lluvia. Y es que llevamos una semana que no para de caer agua día sí, día también. Consideraré que mi integración se ha completado  cuando pueda correr sobre el hielo. Pero no prometo nada, porque no lo veo nada claro. Como no, no podía faltar un selfie de mis piececillos.


El lunes fue un día especial. El mayor empezó de forma oficial en la skole. Estaban todos los padres y madres en la presentación del curso con máquinas de fotografiar de dimensiones importantes. Algunos, como yo, hicimos lo que pudimos con el móvil.  Pero si de algo me he dado cuenta es que el cambio de la barnehage a la escuela se vive mucho en Trondheim.  

Por lo pronto a los niños se les regala una mochila y un estuche con lápices de colores, goma y maquineta con motivo del inicio escolar. El primer día estrenan ropa nueva o visten con ropa elegante. En nuestro caso, no ha hecho falta la mochila, porque la skole les dio una a cada niño en la reunión informativa del colegio.

El primer día les entregaron una libreta, goma y lápiz y también un libro de texto de matemáticas a cada uno. Son dieciséis niños en clase y una maestra por el momento (no sé si más adelante esto cambia o no) Tienen pupitres asignados y hacen actividades todos juntos y/o en grupos reducidos. Las asignaturas que se imparten son noruego, inglés, matemáticas, educación artística y educación física. También informaron de los horarios que son entre cinco y cinco horas y media al día, excepto un día que son cuatro horas escolares. Tienen una hora y diez minutos de recreo cada día y también salen de tur.  Todo esto es gratuito. 

Aparte del horario escolar, antes y después de éste los niños pueden acudir al SFO, servicio que os comentaba en el post anterior. Éste debe abonarse aparte. En nuestro caso, hemos cogido el paquete mínimo de hasta doce horas por semana. Aparte de ser una solución logística para los padres y madres que trabajan o estudian, es también toda una cultura y tradición que los niños acudan a las actividades de tiempo libre.  

Mientras los chicos andan ocupados, he vuelto a estudiar noruego de forma más intensiva de nuevo. He empezado un curso online  a través de skype con una profesora particular. La verdad es que de las dos veces que hemos hablado me gusta  tanto el trato como la manera de impartir las clases. Creo que va a ser provechoso para mí.  También sigo con las reuniones en la ciudad y en septiembre de vuelta al språkkafe de la biblioteca. Y por el resto, este fin de semana trabajaré un día como informadora turística para los visitantes españoles que llegan a la ciudad. Ah, tengo dos amigas que justo acaban de encontrar trabajo regular y estoy muy contenta por ellas . Siempre es bueno que las cosas evolucionen en positivo.

¡Hasta la próxima!


lunes, 11 de agosto de 2014

Como un pulpo en un garaje

Ya llevamos diez días en Trondheim los niños y yo. Los cinco primeros días lo cierto es que iba perdida como un pulpo en un garaje.  No sabía si estaba aquí o en Barcelona.

                          Sants. Barcelona. Imagen de Flickr de Pau Estalella 

No obstante, ahora ya asumo que estamos aquí, con mis más y mis menos, pero con pensamiento positivo e ideas nuevas.    
         
El pequeño ha empezado en su nueva barnehage y el mayor en la skole. Van seis horas (aunque empezamos de forma progresiva)  Para el chiquitín de la casa la adaptación ha sido buena. Las maestras son cariñosas y al ser más pequeña creo que eso ayuda a su integración. Además, claro está que la experiencia de todo el año pasado es un grado.

Por otro lado, el inicio de la skole no ha sido sencillo. De hecho, el primer día oficial de escuela es el 18 de agosto. Pero dos semanas antes se organiza un campus o casal con actividades allí dentro del marco del SFO (actividades en la escuela antes y después del horario escolar y en determinados días festivos)

Se recomienda que especialmente los de primer curso acudan al SFO. Es una manera de entrar en contacto y conocer a los demás niños de forma relajada. Y desde luego para los maestros de la escuela un gran trabajo, porque los chicos y chicas ya empiezan el curso habiéndose conocido previamente. La primera semana de SFO fue complicada. Por las mañanas el mayor no quería ir, aunque luego se quedaba y lo pasaba bien. Nos dijeron las monitoras que saltaba, reía y cantaba. 

La verdad es que el colegio es mucho más grande en dimensiones que la barnehage y le asusta un poco. También el hecho de conocer a nuevas personases excitante para él siempre, pero a la vez le crea un estado de nervios.  A ver esta segunda semana cómo va la cosa.

Eso sí, el viernes fue un día bonito para él. A las tres de la tarde sonó el timbre de casa. Pensé que sería el propietario. Y cuando abrí la puerta...Era su mejor amigo de la barnehage que venía a visitarnos. Estuve charlando con su padre y luego el hombre se fue a hacer recados. Los críos se lo pasaron pipa toda la tarde y estuvieron un buen rato cogiendo grosellas del jardín. Fue como si no hubiera pasado el mes y medio que hacía que no se veían.

Yo también con ganas de nuevos retos y de continuar con los que están en camino. No puedo creerlo pero tras tiempo de letargo, mi cuerpo me pide deporte. Hoy me he comprado mallas, camiseta y zapatillas de deporte para empezar a correr y a hacer ejercicios sencillos. Y a combinarlo con ir de tur, que eso es una de las cosas que más me gusta de Noruega.

Por otro lado, es momento de volver a dar otro empujón fuerte al noruego. Ya os comentaré mis progresos. De momento estoy contenta, porque la semana pasada fui a hacer una clase de español con una familia noruega y entendía sus preguntas y lo que hablaban entre ellos. Mis respuestas eran sencillas y en un noruego aceptable. Me sentí más confiada con el idioma. Pero quiero ganar en fluidez y aprender más. 

Este fin de semana hizo bueno y salimos de excursión por Sjetnemarka. Tampoco faltó la barbacoa. Ni los talleres de jardinería (poda, malas hierbas, trasplante del ficus y otras plantas...) Un fin de semana casero e improvisado, que ya nos hacía falta a los cuatro.

Hasta la próxima! Bones festes a Vilafranca!


viernes, 1 de agosto de 2014

Regreso a Trondheim

De vuelta a Trondheim y antes de que hayan pasado 24h, ya hemos visitado el hospital. Nada grave, pero practicando el noruego casi, casi desde el minuto cero de aterrizar. Con la desconexión de las vacaciones de verano, he tenido que desoxidarme a toda velocidad. 

El chiquitín se ha caído de una silla en casa esta mañana y se ha hecho un corte en la frente. No han hecho falta puntos. Han sido muy amables la doctora y la enfermera que nos han atendido. Le han sellado la herida con un líquido transparente, tirita y a casa. Nos han cobrado 89 coronas. No sé mucho de qué depende el pagar o no, porque la otra vez que fuimos con Arnau por una caída sin ulteriores consecuencias no pagamos nada. Pero seguiré investigando. 

Vuelvo después de un mes entre Barcelona y Cambrils. He visto a algunos amigos y familia de Barcelona y Sant Just. Comidas, barbacoas y otras celebraciones...Todas ellas especiales por diferentes motivos. No ha sido posible quedar con todas las personas que me hubiera gustado, pero llego a la conclusión de que cuando uno vive fuera es imposible. Y que en cada ocasión puedes disfrutar de unos o de otros. También ha tocado hacer algún trámite que otro, pero cosas sencillas por suerte.

Eso sí, nos dio tiempo de hacer unas minivacaciones de tres días los cuatro solos en la playa, que siempre se agradece. Asimismo, esta última semana ha sido muy bonita porque hemos conseguido vernos con mis padres y hermanos (ya os echo mucho de menos)  Todos los primos maternos jugando juntos, algún que otro mojito, los ratos de playa y terraza con mis tatas y mis padres, el abrazo de despedida de mi hermano...Momentos incontables y difíciles de describir, pero de esos que se quedan para siempre.


En resumen, que vengo con las pilas recargadas y con ganas de seguir progresando por estos lares nórdicos. La semana que viene los niños se estrenan en la barnehage y la skole así que ya os iré contando.

Hasta la próxima!

PD. Benvinguts Jana i Bruno! Enhorabona, famílies!