viernes, 6 de abril de 2018

Locuras maravillosas

Estos días me venían a la cabeza las artimañas para vender números de lotería para los viajes de final de curso en la escuela y en el instituto. Y las cestas de comida que se ofrecían como premio. Con su jamoncito, turrones, whisky y otras pijadas varias. Aquí en Trondheim los adolescentes también hacen lo mismo. Si bien las cestas de comida (sin alcohol) triunfan con otros productos como el café o el salmón, hay otro producto que arrasa. 

And the winner is: El papel de water. Como lo leéis. Y te lo traen a la puerta de casa. Asi que este año cuando tocaron a mi timbre me agencié más de 20 rollos de papel de WC. Extraño a los ojos de una no nativa lo es.  Práctico también, porque no has de pensar en comprar cada dos por tres.

Debo confesar que el tema del papel de WC me intriga hace tiempo. Pues en más de una foto de la gente cuando va a la cabaña (hytte), ahí luce el rollo de papel higiénico plantado encima de la mesa.


Otra cosa fascinante de las cabañas noruegas es que algunas tienen el lavabo fuera (utedo). Es una especie de casita de madera y en la puerta siempre hay un corazón. Dentro hay un banco con su agujero y alli te sientas.  Todo orgánico.


                                      Al wc se entra por esa minipuerta

Al principio os tengo que decir que en mi cabeza no cabía la idea del papel higiénico multifuncional. Pero ahora lo uso para todo. Y pues como buena catalana tampoco es tan raro si pienso que tenemos tradiciones como la del tió de Nadal que caga regalos y la figura del caganer en el pesebre. Ahora sonrío, pues ya encontré una nueva conexión catalana - nórdica.

                             Otro lavabo exterior, este más cómodo.

Quizás el tema es algo absurdo, pero me pareció divertido escribir un rato sobre esto. Si os apetece pinchando aquí podéis ver un vídeo que explica el concepto de hytte con mucho humor.

Cambiando de historia, el invierno se antojó muy hermoso en Trondheim. Con los chicos fuimos al poengrenn del barrio. Le han cogido mucho el gusto a esquiar y el mayor ya controla mucho. Y por mi parte, aunque aún me meto alguna de cuidado, también he hecho mis pinitos en el tema. Fui con el grupo de mujeres a un día de esquí en Trondheim. También tuve ocasión de visitar una cabaña en Budal donde para llegar aparte del trayecto en coche habia una hora esquiando.


El esfuerzo valió la pena. Silencio, vistas hermosas y relax absoluto. Y otro fin de semana estuve en otra similar pequeña y coqueta, pero con un extra muy especial. Contaba también con una casa adicional o sauna. Lo más divertido es que se tenía que calentar con leña. Luego locura total. Salir corriendo a fuera sin ropa y hacer un baño de nieve bajo las estrellas y a diez bajo cero.



Ya para acabar de perder la poca cordura que me quedaba, esta Pascua hice mi tur más extremo con mi chico. Unos 35 km de esquí en la bella Reinhem (casa de los renos) en Dovrefjell. Salvaje, inhóspita y hermosa quita a una el aliento tanto visualmente como fiśicamente. Menudo trote me dí.

No las tenía todas conmigo y hubo ratos en que no fue nada fácil. El objetivo era dejar el coche en un aparcamiento comunitario y llegar esquiando a una cabaña situada a una distancia de entre 17 y 20 km desde allí. Pero solo logré esquiar unos 6 kilómetros aquel día. Así que tocó usar la tienda de campaña. Otra aventura. Y es que estábamos a veinte bajo cero aquella noche. Fue sorprendente notar que con el saco no tenía nada de frío en el cuerpo. Lo único fue el piruji que corría en mi naricita. Y lo que sí se llevó la palma fue lograr mear. Os ahorro los detalles (je je).

                             
Con un segundo día de trayecto llegamos a la cabaña, donde pasamos un par de noches. Gente agradable y con mucha experiencia en la naturaleza. Y coincidí con una chica catalana que también se llama Lidia y vive en Trondheim. El mundo es un pañuelo. La hytte es de la organización excursionista más conocida de Noruega (DNT) y tenía muchos extras, entre ellos comida. Lo más curioso es el sistema de pago. Escribes tu nombre en un papel con tu dirección, las noches que has pasado y la comida que has cogido y lo depositas en una urna. En unos meses te envían la factura a casa. Es tan emocionante la confianza noruega.






A la vuelta puse toda la leña en el asador (lo de volver a mear a la intemperie no lo veía nada claro), y fue posible regresar de una tirada al punto de partida y en coche a casa.



                          Aquí sonrío pero estaba hecha puré  :-D

Ya en Trondheim me sentí como una auténtica heroína, llena de vida y con mucho coraje. Así que hora estoy, entre otras actividades, cogiendo más práctica con el coche.

Al ser Pascua hubo tiempo para otras cosas más tranquilas y especiales como pintar huevos en familia o preparar la Mona, algo que ya se está convirtiendo en una tradición que me encanta.



Este invierno ambién tuve oportunidad de visitar Oslo. La excusa fue tomar una prueba de inglés (TOEFL), pero ya os contaré en otra entrada aparte. Una ciudad bonita. Y no faltó una visita express a mi amada Barcelona. Cuando la familia te necesita no hay nada mejor que hacer piña y darse energía positiva los unos a los otros. Pues se está para todo, lo bueno y lo malo.

Por el resto sigo con algunas clases de español, el voluntariado en el grupo de mujeres, disfrutando de las buenas amigas, la zumba y....ahora me he metido a estudiar pajaritos con mi chico. Por otro lado, continuo con mi búsqueda de trabajo: a ratos alegre, a ratos desesperada, pero así es la vida. La buena noticia es que finalmente he conseguido entrar en varios procesos de selección para el trabajo de mis sueños como asesora social. Es muy emocionante poder entrar en el mundo de las entrevistas. Pasito a pasito las cosas parece que van saliendo. Y si la cosa se sigue resistiendo toma forma la idea de hacer una diplomatura en la Universidad, ampliar Spansk med Lidia con negocios paralelos etc.
 
Confío que de esta olla de ideas, algo bueno va a salir y podré disfrutar de un poquito de estabilidad antes del próximo verano. Y con este caos, que tiene más orden del que parece a simple vista, me despido de todos vosotros.

Os dejo con una canción esperanzadora dedicada a mi tierra, que desafortunadamente está viviendo tiempos difíciles, y para cualquiera que quiera volver a empezar.  Y ya ahora sí, cerrando la entrada tipo programa de radio envío una felicitación especial a Carla y a Jaume por las buenas noticias.


Hasta la próxima