miércoles, 7 de mayo de 2014

El alcohol, un tema tabú

El tiempo ha mejorado y se alternan los dias de sol y lluvia en Trondheim. Cada vez hay mas horas de luz. Hasta pasadas las diez de la noche no oscurece y a las cinco de la madrugada la luz del dia hace acto de presencia con todo su esplendor.

Por aquí ya se palpa en el ambiente que pronto llega la fiesta nacional noruega (17 de mayo). Todas las tiendas tienen banderas del país. Se venden los vestidos tipicos que llevan los noruegos esos dias, tanto adultos como niños. Y es que lo viven mucho. A diferencia de otros paises, aquí se podria definir como el día de los niños. Ese día desfilan por la ciudad y pueden comer todo el helado y las salchichas que quieran. Será mi primera vez y estoy ilusionada porque este año se cumplen 200 años de la Constitución, asi que seguro que será muy especial. 

                                          Foto de Flickr de Carlos Buj

Por otro lado, del 1 al 17 de mayo los estudiantes que acaban el instituto en toda Noruega celebran una fiesta conocida como russefest. Durante esos dias es un no parar de pruebas, juegos y actos para divertirse. Incluso compran autobuses y los pintan ellos mismos para circular por la ciudad. Según la carrera universitaria o formación profesional que vayan a hacer llevan pantalones de diferentes colores con tirantes caídos. Hay momentos de bastante desmadre por el alcohol. Si pincháis aqui encontrareis todos los detalles.

El tema del alcohol es una de las cosas que no me gustan de este país. En Noruega, no es costumbre tomar una sola cerveza o beber una copa de vino. De hecho, entre semana no está bien visto beber alcohol. En cambio, durante los fines de semana esa regla se levanta y se bebe (helgefylla). El problema es que se concentra todo el consumo de alcohol en uno o dos días. Los viernes es habitual ver a gente de diferentes edades comprando varios packs de seis cervezas de medio litro en el supermercado. No existe la cultura de disfrutar con la bebida, sino más bien de pillar la taja. El objetivo es emborracharse. Esto choca viniendo de una cultura mediterránea donde la bebida alcohólica se concibe como un placer (el tema de las borracheras queda reducido a épocas jóvenes en los bares baratos y no les va a todos los jóvenes)

Este fenómeno, tristemente, provoca mas de uno y dos incidentes en Trondheim los fines de semana. Estos días en los periódicos el protagonista es el deportista Petter Northug, que estrelló su coche el domingo pasado en la ciudad. Al parecer había ingerido alcohol, había  exceso de velocidad y denegación de auxilio.

Lo cierto es que en la televisión hay algunos anuncios para gente que tiene problemas con el alcohol. No obstante, este tema es tabú para los noruegos, aunque lo normal sería hablarlo y afrontarlo, porque es algo serio. Obviamente de todo hay en la viña del Señor y seguro que hay un porcentaje de noruegos que no beben de esta forma. Pero debería ser algo prioritario tratar de solucionar estos hábitos tan tóxicos, puesto que se sabe que existen.

¡Hasta la próxima!








2 comentarios:

  1. Hola Lidia, te cuento que yo también estoy ansiosa esperando el 17 de mayo :P. Con respecto al tema del alcohol, estoy totalmente de acuerdo con vos. ¿Sabés? El otro día hablábamos justamente de eso con mi novio (por lo del accidente que decís) y según él, el problema es que al ser algo tan prohibido, con tanta carga de impuestos, "mal visto" entre semana, es como que el fin de semana se "desbocan los corderitos" y .......
    No sé si tendrá razón, pero los fines de semana en Bergen, se nota, yo lo he visto, y el panorama no es nada alentador.
    Abrazos :).

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    1. Me encanta saber qué piensa un noruego del tema. Es un tema del que les cuesta mucho hablar. Esperemos que pronto se tomen cartas en el asunto. Abrazos y feliz finde :)

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