lunes, 24 de febrero de 2014

Koselig!

El sábado fuimos los cuatro de på tur (excursión) por Sjetnemarka. Me sucedió algo inesperado. Igual pensáis que ando un poco loca, pero tuve mi primer momento koselig en Noruega.

Estábamos subiendo por un camino y...Mirad qué colgaba de las ramas desnudas de un árbol:


¡Un corazón de trapo! El hilo donde pendía estaba medio roto. Algo desteñido, se notaba que había pasado por diferentes inclemencias del tiempo.  Al verlo me sentí a gusto con la vida, que no siempre es fácil, pero nos regala estos instantes impagables.

El mismo día por la noche llegó otro momento delicioso. Pau y yo estábamos viendo una película, cuando de repente observé, desde la ventana, el caminar de unas patitas delgadas por el jardín. A continuación, divisé un lomo marrón con algunas manchas blancas. Sin duda, un cervatillo. 

Releyendo el post, quizás parece una historia de Disney lo que os cuento hoy. Pero bueno, un poco de azúcar a lo Mary Poppins de vez en cuando no hace daño.

Por cierto, si os apetece compartir vuestras experiencias koselig, estaré encantada de conocerlas.

¡Hasta la próxima!

5 comentarios:

  1. Ui, últimaments koseligs d'aquestos no tinc ;) Però anem fent, bé.
    Els meus koseligs són més de anar-me'n a dormir i pensar en lo plàcida que pot ser la nit i dormir i... i de repent el plor de la petita, que no passa una bona època (està molt poruga, tot li fa por pobreta...). Una abraçada!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí que és koselig el pensar que dormiràs ;). Nosaltres també tenim al petit, que fa d'excursionista algunes nits, i s'instal.la al nostre llit jijiji. Aquesta nit no ha estat massa koselig perque pobret està amb febre, i ja saps com van les nits quan estan malalts. Espero que a la petita li passi aviat la por i pogueu gaudir d'unes quantes hores de son seguides. Una abraçada!

      Eliminar
  2. Es una de mis palabras noruegas favoritas :) Y además me encanta todo lo "koselig". Un momento muy "koselig" (valga la redundancia, jaja), para mí, fue la noche del festejo de mi cumpleaños en Noruega. Siempre me gustó la nieve y, como soy de una ciudad bastante calurosa y tengo que recorrer media República Argentina para verla, tenía muchas ilusiones de ver nevar en Bergen. Salimos a cenar con amigos y cuando volvíamos, a unos metros de llegar a nuestro "home sweet home" empezaron a caer preciosos copitos de nieve :) Al día siguiente teníamos otro festejo con la familia, así que lo primero que hicimos fue decorar la "selva negra" que teníamos preparada para llevar de postre. Una vez terminada la tarea, nos sentamos en el sofá con nuestro "varm sjokolade" y, a la luz de las mini velitas, contemplamos durante largo rato, la ciudad teñirse de blanco a través de la ventana. No obstante, no sé si coincidirás conmigo, creo que Noruega en sí (y su gente) es muy "koselig". Pero creería que ése, fue el "más más", al menos para mí. :P
    Saludos y que termines bien tu semana :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por compartir estos momentos tan bellos en el blog. ¡Feliz finde!

      Eliminar
  3. De nada. Besitos y feliz finde para vos y tu familia :)

    ResponderEliminar