sábado, 8 de febrero de 2014

Sensaciones

Ayer fue un buen día. Salí a dar una vuelta por el centro por la mañana. Estuve caminando relajada. Hacía días que no me sentía así.

Tampoco falté a mi cita semanal en el Dialogsenteret. En la reunión de mujeres (Morsom Fredag)  cada una de nosotras contó sobre su semana en Trondheim. Hubo algunas situaciones divertidas, mientras debatíamos palabras habituales en Noruega. Un ejemplo es koselig. Los noruegos la dicen en multitud de ocasiones. Se utiliza para referirse a situaciones, personas u objetos que hacen que te sientas a gusto. Pero como extranjera cuesta acertar su uso. De hecho, una de las voluntarias noruegas dijo que más que koselig, ella emplea las palabras trivelig, o hyggelig...

Además nos visitó una conferenciante que pertenece a la organización For Fangers Pårørende (Para Familiares de Presos) Este grupo ayuda a aquellas personas que tienen a alguien en prisión. Organizan muchas actividades, charlas, y disponen de asesores y terapeutas de familia. Los niños son su principal foco de atención. También disponen de material educativo.

                                             Lisa visita a papá en la cárcel

La charla me recordó a la facultad, cuando iba a la clase de Ejecución Penal.  El docente que impartía la asignatura era un experto en los derechos de los presos y sus familias. El profesor nos contaba que la cárcel podía parecer lejana a todos nosotros, pero que no lo era. En España, hay delitos que pueden afectar a cualquiera sin pretenderlo, como, por ejemplo, los relacionados accidentes de tráfico. Por otro lado, también me hizo pensar en mi último trabajo en Barcelona (en algunas acciones judiciales había personas que estaban en prisión). Realmente interesante.

También empiezo a cogerle el truquillo al språkkafe, y me divierto jugando a Alias con otra gente. No usamos tablero ni temporizador, sólo las cartas. Versión light, vamos. Pero nos echamos unas risas durante un rato. 

Por cierto, ya he llegado al ecuador del curso de noruego.  Ahora me quedan tres semanas más y acabo. Estoy hecha polvo con tanto idioma, pero cuando lo pueda reposar al menos un mes, sé que habrá valido la pena. De hecho, va dando sus frutos:

El otro día se quemó un poco la mano Adrià. Fui a la farmacia, y lo pude explicar en noruego. La farmacéutica fue muy amable. Eso sí, la clavada no la evité. Aquí los medicamentos son muy caros. Desde que por una caja de ibuprofeno pagué algo más del doble que en Barcelona, a cada visita que viene le pedimos que nos traiga una caja. Aparte de los embutidos, que siempre son bienvenidos jiji.

Por otro lado, estoy experimentando nuevas sensaciones en la ciudad. Comienzo a tener varias personas en quién confiar, y eso me da mucha tranquilidad. El otro día hubo la necesidad de que los niños se quedaran con alguien un rato. Una amiga y su marido los cuidaron la mar de bien. Y obviamente, cuando a mi me necesiten estaré encantada de colaborar.

Por último, esta semana, en la barnehage  han hecho muchas actividades relacionadas con el pueblo Sami (el pasado 6 de febrero fue su Día Nacional)  Incluso probaron una sopa típica.

                                                     Foto Flickr de Emiliano Marin (casa sami)

La semana que viene los chicos tenían previsto ir a pasar un día a la nieve en  la zona de Granåsen. Pero como sigue sin nevar, han cambiado la excursión y visitarán la zona de Sverresborg-Byåsen. Allí hay muchos bosques, y naturaleza para parar un carro.

¡Hasta la próxima!


7 comentarios:

  1. Qué bueno que poco a poco hayas encontrado gente en quién confiar. Yo, justo estaba escribiendo algo de lo lindo que se siente saber que hay gente que, en un país taaan lejano, está pendiente de mi regreso
    Besitos y buen fin de semana!

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    1. Hace que una se sienta mejor, y más arropada. Y es que la gente en general necesitamos de otra gente. Un abrazo y gracias por leerme.

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    2. Sí, y estando tan lejos de casa más todavía! De nada...es un placer pasar a visitarte :) Otro abrazo para vos.

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  2. Debe ser un alivio y u a compañía enorme encontrar a gente en la que confiar ¡enhorabuena! Ya llevas el camino muy avanzado!!

    Besos

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    1. Sí, la verdad es que estoy contenta. Pasan los meses, y las ganas de integrarme van dando sus frutos.Aunque aún queda camino por recorrer, es un alivio empezar a confiar. Besos.

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  3. suena un poco a cozy, en inles, no?vamos eso es lo que me ha venido a la cabeza...Aqui es schön....todo es schön....excepto la comida! no vayas a decir que la comida es bonita que te Miran raro...lecker lecker! Mira algo positivo, por lo menos el noruego que aprendes es el que necesitaras....yo ahora tengo que lidiar con entender el dialecto, que se parece mas bien poco...

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    1. No te creas Meri. Estoy aprendiendo el oficial que se enseña, pero aquí también hay dialecto. Así que va para largo. No me aburriré no :DD

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