viernes, 6 de septiembre de 2013

Cicatrices

El otro día pasó una cosa curiosa que me dio qué pensar. Esta semana Pau estuvo fuera un par de días por un viaje de empresa. Cuando fuimos a recogerlo, nos encontramos a un colega suyo, que apenas conocemos, y los niños se lanzaron en plancha a por él. Me quedé tan cortada. No supe reaccionar. Me volví a dar cuenta de lo importante qué es para ellos su papá.


A veces, se tiende a olvidar que existe esta figura, y se actúa como si todo lo relacionado con los niños debiera recaer sobre la madre.

Antes de emigrar toda la familia a Noruega, primero vino Pau tres meses antes. Empezó a trabajar, y a vivir en Trondheim, y aparte tuvo que hacer mucha burocracia. Hay quién puede pensar que tres meses son poco tiempo, pero dejó mucha huella en todos nosotros.

Los niños y yo estábamos de acuerdo en mudarnos en poco tiempo, pero esperábamos en Barcelona su visto bueno a dar este paso de gigante. No queríamos precipitarnos tampoco. Fueron unos meses muy duros, aunque desde aquí quiero agradecer a la familia y amigos lo bien que se portaron, mientras yo estuve sola con los crios.  También mi más sincero agradecimiento al CEIP Pràctiques 2 y a L'escola bressol El Ratolinet, las escuelas de Arnau y Adrià respectivamente en Barcelona. Y a algunos comerciantes de mi querido barrio de Sants (petons, Cristina!)

Las primeras semanas Adrià buscaba a Pau. Cuando se levantaba, iba a la cocina para que le preparara el desayuno, como era  habitual. Al hacer skype o hangout, intentaba tocarlo a través de la pantalla, y lo buscaba por detrás del ordenador (concretamente pensaba que saldría Pau del altavoz) Arnau, en cambio, expresaba lo mal que se sentía, culpabilizándome de casi todo. Había muchos días que se enfadaba por cosas sin importancia, y yo me sentía triste, porque sabía que que lo único que quería era estar con su padre.

Conforme el tiempo pasaba, al quedar con amigos, los pequeños sólo querían ir con la presencia masculina. A mi me preocupaba, pero a la vez pensaba cuánto echaban de menos a su padre, y qué lento pasaba el tiempo.

A mi también me hirió la separación. Cuando nos volvimos a ver, mi pareja y yo, éramos como dos solteros. Pero estar aquí es una aventura excitante. A lo que algunos les llaman dificultades, nosotros los vemos como metas o sueños. Los cuatro estamos aprendiendo a vivir en una cultura de lo más organizada y respetuosa. Hemos aprendido a organizar una nueva economía familiar en un país con necesidades muy distintas al nuestro de origen, y con unos precios, que, a veces, asustan. 

Pero hay cosas que se me hacen cuesta arriba, cómo no poder abrazar a los míos, hacer confidencias con las amigas, o simplemente tomar un cocktail en Pub Lunatic escuchando música y chistes en tu idioma. Toda una serie de pequeñas cosas, que forman parte de una.

Ahora entiendo la ilusión con que muchos immigrantes en Barcelona compraban el billete de avión a su país, para pasar las Navidades con los suyos. Por cierto, os confirmo que nosotros ya hemos comprado los nuestros para entonces.

                                          
Hasta aquí mi reflexión. ¡Feliz finde!



4 comentarios:

  1. Me encantó leer tus reflexiones en este post. Y salvando las distancias, las mamás que trabajamos en casa, con un papá que trabaja fuera muchas horas, también tenemos esa sensación,...la llegada de papá es una fiesta! Y los lazos que unen al peque ( por cierto tb Arnau )con papá son fuertes e intensos, tanto que durante el finde no se separan uno del otro!
    Lo dicho, me encantó elpost.
    Saludos desde Barcelona!
    Núria
    http://batasigualada.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus palabras, me han emocionado. Estoy encantada de descubrir tu blog también. Ya me imagino que trabajar en casa, aunque parezca cómodo, tiene sus momentos duros, y más si estás sola muchas horas. Me ha hecho mucha gracia que tu hijo se llame también Arnau. En la foto del río salen muy graciosos padre e hijo. Se nota que hay amor. ¡Saludos desde Trondheim y nos vamos leyendo!

      Eliminar
  2. Dentro de poco nosotros también tendremos una separacion y se que los niños no lo llevaran nada bien aunque espero que no sea mucho más de 1 mes. Besos guapa!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si te ven tranquila a ti, ellos lo estarán también. Y siempre queda el skype y el hangout que ayuda. Muchos ánimos, porque sé que es duro, pero todo pasa y con mucho amor los niños estarán bien. Y si tu puedes contar con alguien que te eche una mano genial, sobretodo en el plano psicológico va muy bien tener el apoyo de la gente que quieres. Besos y cualquier cosa aquí me tienes.

      Eliminar