martes, 11 de junio de 2013

Poti-Poti

Hoy os traigo un mix de cosas que hicimos ayer en tierras noruegas.

En primer lugar, nos dimos de alta en la policia los niños y yo como residentes de la ciudad. Pau nos acompañó. Costó un par de horas el trámite, pero la verdad es que fueron  muy amables en todo momento. Lo próximo será gestionar nuestro número personal, que nos permitirá hacer las gestiones del día a día sin problemas. 

Las instalaciones de la policia de immigración de Trondheim son curiosas. Si el trámite requiere protección de datos, corren unas cortinas de terciopelo a modo de cabina electoral. Cada cubículo tiene las cortinas de un color, y desde la sala de espera solo ves los pies del ciudadano en cuestión.

Luego fuimos a comer un kebab los niños y yo, y a descubrir más el centro de la city. Resulta que en la calle donde trabaja Pau, hay un montón de tiendas de decoración y varias floristerías. Finalmente, di con un local de detalles para el hogar a precios asequibles. Entre los tres, pudimos elegir algunas cosas para hacer la casa más acogedora.



También les regalé un Lego para los dos, ya que aún no tenemos la mudanza aquí y echan de menos sus juguetes. A ver si esta semana hay suerte y llega el camión de Oslo.

Por cierto, ayer  tuve que sacar mi inglés del garaje de nuevo. En este caso, para pedirle a una dependienta un cesto de la compra. No me salía la palabra. Venga a darle vueltas haciendo la definición de lo que quería. Hasta que al final di en el clavo, y me dijo "Baskets are here"

Es difícil acertar la expresión cuando hablas un idioma ajeno, aunque academicamente sepas cómo decirlo. Pero me voy desoxidando. Me hace feliz el reto idiomático.

En cuanto al noruego, hemos empezado una pequeña biblioteca. De momento tenemos tres cuentos infantiles, y un diccionario. Recuerdo que de pequeña, mi madre nos regalaba libros a mis hermanos y a mi. Bajábamos cada semana a comprarlos a un puesto del Mercat de la Llibertat. Allí me empecé a estrenar con mis primeras lecturas de Enid Blyton.

Hoy el día está siendo más complicado. Adrià està rebelde, y hace una tras otra. Paciencia. No queda otra.

¡Hasta pronto!






2 comentarios:

  1. Ay! Enid Blyton, qué tiempos aquellos...
    Sigue asi, y Pau tb, que es muy interesante leeros! Muuuuaks!!!

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  2. Jajaja sí...¡Qué tiempos!
    Gracias por los piropillos y un beso a la panxeta y a ti

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